-->

Ya te llamaremos.

miércoles, 7 de agosto de 2013

¿Por qué me siento tan nerviosa y tan insegura; por la persona que me va a ''increpar'' o por mis ''líos mentales''? Más bien diría que por lo segundo.

Un día completamente normal, natural, cotidiano; hasta que recibes una llamada para una entrevista de trabajo, te alegras, ¿qué sino? Pero en seguida tu mente empieza a traicionarte con cuestiones como: ¿Qué me pongo? ¿ Le doy la mano al entrar? ¿Qué movimientos debo hacer? ¿Le soy sincero en todo? 

Y por más que intentas relajarte, por una extraña y frustrante razón, ¡no puedes!
En mi caso, estoy así porque será mi primera entrevista, aunque seguramente todos hayáis vivido esta situación y muchos de vosotros iríais con una confianza plena (pocos casos creo yo).
¿Por qué nos cuesta tanto a algunos desenvolvernos ante una persona a la que solo vas a ver una o dos veces en tu vida? Te sientas, conversas con ella y te vas. No parece tan difícil, ¿verdad?

Pero lo que muchos vemos es lo que hemos oído de terceras personas. Esa gente es la que lo pinta de forma horrible por alguna experiencia que hayan tenido en su vida, y nosotros somos los culpables de darle importancia.
Para mi y para muchos es algo desconocido, por lo que una opinión de alguien que está acostumbrado a entrevistas puede repercutir en ese sentimiento de miedo o nervios, como queráis llamarlo.
Vemos más los errores que las ventajas, y eso es lo que nos hace jugarnos ese puesto de trabajo.
¿Por qué no ser positivos y darlo todo?
Os animo, y esto me sirve para mi, a que penséis que esa persona que te está esperando en su pequeño despacho detrás de su mesa de escritorio lo único que quiere es ver naturalidad, sinceridad, seguridad en uno mismo (un poco de nerviosismo si hace falta, seamos realistas) y una gran disposición para mostrar la experiencia (ya sea mucha o poca), las ganas de trabajar y el ánimo de aprender; y lo último que le hace falta es hacer que esa persona que tiene buenos recursos desaproveche una oportunidad por el miedo inculcado por la sociedad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario